Instalaciones petroleras del Golfo de México a máxima seguridad

29 febrero de 2012

La Agenda Setting

Instalaciones petroleras del Golfo de México a máxima seguridad

Jorge A. Leyva

Es cierto que Gobierno Federal parece no tener llenadera porque no le alcanzan los recursos para su estrategia de seguridad y hoy por hoy siguen aumentando los presupuestos. El problema principal parece radicar en que a pesar de  las autoridades federales dicen dedicar más y mejor personal para el combate del crimen organizado, al tiempo que advierten que poco a poco se va capacitando al personal, aunado al uso de inteligencia que ha logrado dar golpes certeros a las organizaciones criminales; a pesar de todo ello, la sociedad percibe resultados muy magros ya ni siquiera –digamos- medianamente efectivos. Ayer El Universal dio a conocer documentos presentados por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y la Secretaría de Marina (SEMAR) a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público el pasado mes diciembre de 2011 donde ambas instituciones demandan una inversión de casi 2 mil 380 millones de pesos para brindar una mayor seguridad y confianza a los habitantes y evitar que algunas entidades federativas se conviertan en rehenes de la delincuencia organizada.

Según estos documentos las entidades donde se ha detectado mayor incidencia de la delincuencia organizada son Tamaulipas, Tabasco y Michoacán. En los documentos se revela que solicitan la instalación de cuarteles móviles con 400 elementos cada uno; tres que se instalarían en Tamaulipas y uno más en Michoacán. En Tabasco para aumentar la estrategia de seguridad, la SEMAR construiría un muelle con capacidad de atraque para dos patrullas oceánicas y dos patrullas interceptoras e instalaciones para una compañía de Infantería de Marina en tierras tabasqueñas, y según se desprende de los escritos esto por: “el riesgo que se tiene de sufrir atentados o ataques terroristas a instalaciones marítimas y terrestres vinculadas con la explotación de hidrocarburos en la mayor zona petrolera de México, Sonda de Campeche”.

Históricamente a partir de los años ochentas los militares han ido incrementando su presencia militarizando la seguridad pública y la seguridad nacional, situación que se incrementó en 1994 después del levantamiento armando del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en México. En ese marco las instalaciones petroleras siempre han sido básicas en la estrategia de seguridad nacional de México pues podrían ser objeto de presuntos sabotajes, incluso también los principales oleoductos donde se mueven grandes cantidades de hidrocarburos y gas y esto sin duda afectaría la capacidad exportadora de México: el tema se vuelve de alta prioridad nacional.

Además los militares y marinos –desde la llegada de Felipe Calderón- han incrementando día a día su presencia en las calles, esto ante la insuficiencia del Estado Mexicano de brindar a la sociedad una adecuada seguridad pública; tal y como se confirmó a finales de diciembre del 2010 cuando Wikileaks reveló que el Gobierno Federal de México admitía ante el Gobierno Estadounidense la pérdida de control en algunas zonas del país. En el cable 228419 fechado originalmente 2009-10-05 Source Embassy México de clasificación CONFIDENTIAL advertía que los diplomáticos mexicanos reclamaban ayuda a los Estados Unidos ante la impotencia y falta de control en algunas zonas a causa del crimen organizado según la propia filtración de Wikileaks.

¿Ante que estamos parados? Desde 2007 hay reportes –la agencia Prensa Latina da cuenta de ello- de que militares resguardan instalaciones petroleras en el Golfo de México, la Base de Operaciones Antiterroristas Ixtoc-Alfa de la Armada de México siempre ha contado con personal castrense y está ubicada cerca de los campos de petróleo de Cantarell y Cayo Arcas en la Sonda de Campeche, ahí se obtiene 83% de la producción mexicana de petróleo y opera desde el 22 de diciembre de 2003. No es nuevo que la SEMAR desde hace tiempo vigile la infraestructura marítima petrolera y esté preparada para responder ante posibles contingencias, sus infantes tienen capacidad de reacción y la operatividad de los buques y aviones manejan en tiempo real datos, coordenadas, situaciones y escenarios de riesgo; lo nuevo aquí, es que se aumente de manera importante el personal y las instalaciones militares en la zona ante posibles reportes de atentados o ataques a instalaciones petrolera. La pregunta que queda en el aire es ¿De quién o quiénes? Les comparto nuestro correo electrónico: jordymx@hotmail.com y en twitter nos puedes encontrar como: @Jorge__Leyva y como @LaAgendaSetting