jueves, 12 de agosto de 2010

El Sueño americano región 4

12 de agosto de 2010


Columna: LA AGENDA SETTING

El Sueño americano región 4

Jorge A. Leyva

El racismo es la mayor amenaza para el hombre, lo máximo del odio por el mínimo de razón: Abraham J. Heschel

“Salieron de los matorrales y nos golpearon con tubos de hierro. Nos quitaron los celulares y el poco dinero que andábamos y a pesar de habernos despojado de todo, nos seguían golpeando, entre los golpes y el forcejeo, logré escapar y busqué una patrulla, pero cuando regresé ya los encontré muertos”: así inició su dramático relato que Elkin Donaldo uno de los dos hondureños que junto con Eblin Alexander salvaron la vida la medianoche del pasado domingo cuando transitaban por el poblado Buenavista Apasco, municipio de Macuspana en Tabasco. Relataron que la noche del domingo caminaban entre la maleza, junto a las vías del tren, en compañía de Kenia Carolina Galeas Gómez, José Antonio Calderón Orellana y un joven conocido solamente como Geovanny, todos de nacionalidad hondureña, quienes esperaban el ferrocarril que usualmente descargaba material para la Cementera Holcim Apasco.

Al igual que muchos mexicanos que sufren vejaciones, acoso y hasta la muerte en los Estados Unidos en la búsqueda del llamado sueño americano, así a estos tres hondureños su sueño se convirtió en pesadilla a grado tal que les costó la vida. Esta vez no fue la bestia de acero como suelen llamar al tren, sino la bestialidad humana; todo al parecer víctimas del odio de un grupo de criminales que se hacen llamar los “caza indocumentados”. Los hondureños fueron asesinados a sangre fría, atacados por al menos cinco individuos embozados, encapuchados. Agredieron sexualmente a Kenia Carolina –quién presuntamente era pollera- y luego colocaron su cabeza sobre las vías del tren, donde le descargaron varios golpes con un tubo hasta matarla. Después de la misma forma asesinaron a tubazos a José Antonio y a Geovanny. Elkin Donaldo escapó y se encontró con una patrulla policial, pidió ayuda pero para cuando llegaron únicamente encontraron tres cuerpos sin vida de sus acompañantes. Eblin Alexander sobrevivió porque se subió en un árbol, desde donde observó con horror cómo el grupo de criminales masacraba a sus compatriotas.

Agentes ministeriales y el Ministerio Público se trasladaron al lugar para dar fe del levantamiento de los cuerpos y la Procuraduría General de Justicia del Estado ya comenzó la averiguación previa por los presuntos delitos de homicidio y asalto con violencia y en pandilla. Sí sucedió en Tabasco, pero también sucede en otros estados. El tema de vejaciones a los migrantes centroamericanos no es nuevo. A principios de este 2010, el pasado 26 de enero en Oaxaca centroamericanos denunciaron que fueron asaltados en dos ocasiones en el tren que viajaban procedentes de Arriaga, Chiapas, con destino a Ciudad Ixtepec, Oaxaca. El asalto fue tan violeto que dejó tres muertos, dos mujeres violadas y menor de edad herido, en las inmediaciones de Chahuites, municipio ubicado en la zona oriente del Istmo de Tehuantepec. En esa ocasión la hondureña Esmeralda Cases, una de las 100 centroamericanas sin papeles que arribaron al albergue “Hermanos del Camino”, dijo que fueron asaltados en dos ocasiones, la primera por hombres que se identificaron como policías federales, quienes les despojaron del dinero que llevaban. En la segunda ocasión fueron asaltados por hombres armados, Esmeralda Cases denunció que vio que su esposo Melvin Jesús fue herido de muerte, por impactos de bala. “Corrí para salvar mi vida” dijo al mismo tiempo que alcanzó a ver cómo asesinaban a dos personas más.

Vale pena decirlo con todas sus letras, las personas migrantes en México se enfrentan a una crisis de derechos humanos que las deja prácticamente sin acceso a la justicia, por miedo a represalias y a ser deportadas del país si denuncian los abusos. La persistente inacción de las autoridades federales para enfrentar los abusos cometidos contra migrantes irregulares ha hecho que su viaje a través de México sea uno de los más peligrosos del mundo. Amnistía Internacional el 29 de abril de este año denunció en su informe “Víctimas migrantes en el País”, la existencia de un panorama escalofriante para los indocumentados que cruzan México, ya que sufren secuestros, violaciones y otros abusos a sus derechos humanos, los cuales por lo generan quedan impunes. Ese mismo día exigió al Gobierno de México poner fin a los abusos contra indocumentados que se cometen en el país, en los que participan funcionarios públicos en colusión con bandas de delincuentes. Rupert Rox, investigador de Amnistía Internacional afirmó en esa ocasión que en muchos casos los funcionarios mexicanos ignoran los hechos o participan en secuestros, violaciones y asesinatos de indocumentados. Más grave aún es el dato de que seis de cada diez mujeres y niñas migrantes sufren violencia sexual, por lo que ya es común que traficantes de indocumentados exijan a las mujeres que se suministren una inyección anticonceptiva antes del viaje todo para ¡Evitar embarazos producto de la violación!

¿Con que cara les exigimos a los norteamericanos que nos traten de manera justa a nuestros connacionales cuando nosotros no hacemos lo propio con los centroamericanos? ¿Con que cara hablamos de respeto a los derechos humanos cuando nosotros no respetamos los derechos de los migrantes de Centroamérica? ¿Cómo es posible ver la paja en el ojo ajeno y no ver la propia viga en el nuestro? Y nos quejamos de Arizona y sus Minutemen que son un grupo paramilitar de cacería de inmigrantes. Y no fueron los primeros pues antes de estos existieron los Ranch Rescue, Camp Thunderbird cuyo lema era “dos balazos al pecho y uno a la cabeza”, Civil Homeland Defense, Border Guardian, Yuma Patriots entre otros y posiblemente, el más alarmante de todos Neighborhood Ranch Watch cuyo atractivo era invitar a turistas locales a divertirse bajo el sol de Arizona cazando inmigrantes ilegales. ¿De qué nos quejamos? Si en México ya tenemos nuestros a los “caza indocumentados”. Es temas sin duda es prioritario y nos demanda voltear la mirada a nuestra Frontera Sur.

Así es Canito tienes razón hay que felicitar a nuestro amigo Miguel Gómez del Rosario porque recién acaba de ser nombrado gerente general de la Revista GB Magazine Tabasco, no le deseamos suerte porque esa es resultado de la casualidad, le auguramos éxito que es resultado del trabajo tenaz y perseverante. ¡Éxito Miguel! Síguenos en twitter: http://twitter.com/Jorge__Leyva

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