09 de octubre de 2012
La Agenda
Setting
En el tema de
migración no hay colores partidistas
Jorge A. Leyva
En México existen
63 casas de migrantes y 35 diócesis que atienden sin fin de lucro a las
familias de los migrantes que se quedan en el camino. Ellos son los que a falta
de una política adecuada del Gobierno Federal y de su olvido le han entrado a
la atención de la mayoría de los migrantes en todo el país. La explotación que
se genera en torno a la migración llama poderosamente a tomar medidas que enfrenten
de manera eficaz este ominoso tema que a decir de los que saben, como el Padre
Alejandro Solalinde o Fray Tomás González de “72” Casa del Migrante en
Tenosique, Tabasco, desafortunadamente se acrecentó por la falta de un adecuado
marco legal que proteja a quienes en su paso por todo México y en la búsqueda
de un mejor nivel de vida son abusados en todas formas no sólo por los grupos
organizados delincuenciales, sino también por las propias autoridades.
El asunto no es
tema menor porque a niveles locales y regionales, los estados y municipios han
dejado vacíos legales y la gente no encuentra a donde ir. Es decir faltan
políticas públicas para los mexicanos deportados. En vísperas de una urgente
Reforma Migratoria, existen vacios legales que dejan en indefensión a los
migrantes que hoy por hoy, no encuentra a quién acudir. ¿Ante que estamos
parados? Ni más ni menos que de secuestro de migrantes. De violencia en los
operativos que realiza el Instituto Nacional de Migración. De problemas en la
procuración de justicia pero también de impartición de justicia. Urge moralizar
a nuestros cuerpos de seguridad pública y certificarlos. El ejército está en
las calles. Hay reclutamiento de mexicanos y extranjeros por organizaciones del
crimen organizado. El tema le duele a México pero se tiene que transformar la
realidad. Y si esto fuera poca cosa, los secuestros masivos han regresado. Ya
basta que desde el Instituto Nacional de Migración se toleren y hasta promuevan
practicas que lastiman a los migrantes. No podemos perder de vista que la
migración se convirtió en la esclavitud moderna; y eso es inaceptable.
Fray Tomás González
me comentó que se vive una situación de emergencia y de una gran tragedia en el
tema de los migrantes. Desde la frontera sur al norte y del pacífico al atlántico
es un verdadero viacrucis para quien decide recorrer el país para emigrar hacia
los Estados Unidos. El Instituto Nacional de Migración golpea y entrega incluso
al crimen organizado a los migrantes centroamericanos. Pero también están los
migrantes mexicanos del Bajío por ejemplo. Y para que veamos amable lector como
está la situación, en Tenosique el anterior delegado del Instituto Nacional de
Migración era la cabeza de una red de trata de menores. Incluso está en la
cárcel. Es lamentable. Vergonzoso. Hay que escuchar pero también se debe
actuar. Por eso hay que entrarle al tema de legislar para hacer contrapeso a lo
que les ocurre a los migrantes. Tratándose de los migrantes no debe haber
colores de partidos políticos. El tiempo apremia.
Así es Canito
tienes razón, duro el dato pero cierto. Los gobiernos panistas dejan 97
periodistas asesinados; 16 fueron víctimas de desapariciones forzadas. Y es que
a partir del 2000, durante las administraciones de Vicente Fox y Felipe
Calderón, el ejercicio del periodismo en México se convirtió en un grave
riesgo, según informes de las organizaciones no gubernamentales, como el Centro
de Periodismo y Ética Pública y Reporteros sin Fronteras. El año más violento
para la prensa mexicana fue el 2008, cuando se registraron catorce muertes de
reporteros y fotógrafos. Les comparto nuestro correo electrónico:
jordymx@hotmail.com y en twitter nos puedes encontrar como: @Jorge__Leyva
No hay comentarios:
Publicar un comentario