La Ley de Seguridad o la inminente militarización del país

28 de abril de 2011

La Agenda Setting

La Ley de Seguridad o la inminente militarización del país

Jorge A. Leyva

No es nuevo el argumento del Gobierno Federal de aplicar una estrategia encaminada a militarizar al país esgrimiendo que para erradicar los carteles de la droga es necesaria la intervención de la milicia por estar más equipados e incluso mejor preparados. Hoy con la reforma a la Ley de Seguridad que se encuentra en la Cámara de Diputados nos dicen que es impostergable que se apruebe para enfrentar la inseguridad en la que está envuelto el país. La cuestión es que en cierto sentido si se aprueba como actualmente está, el Ejército se convertirá en una policía más, y todavía más grave es que se militarizaría al país. Incluso con el riesgo de suspender las garantías individuales consideradas en nuestra magna.

Además de que hay poca claridad en algunos de los planteamientos que modifican de manera sustancial la minuta enviada por el Senado. En ella también se intenta acotar y definir las facultades del Ejército en tareas que le corresponden a la autoridad civil. Otra de las modificaciones que se pretenden implementar está otorgarle mayor poder al Presidente de la República para que haga uso de las fuerzas armadas en lo referente a seguridad. También se busca proteger a los militares cuando cometan algún ilícito. Y sobre todo este último tema le mete mucho ruido a las modificaciones de la Ley de Seguridad porque en los últimos años, los casos donde la población asegura haber sido víctima de alguna agresión, por parte de los militares en la denominada lucha contra el narcotráfico han ido en aumento.

Si esta reforma se llega a concretar el Ejército sería como una policía única que desempeñaría muchas de las funciones que hasta ahora ejecutan los miembros de las corporaciones policiacas municipales, estatales y federales. Felipe Calderón podría ordenar el despliegue de más militares para patrullar calles, catear domicilios y detener delincuentes, y con ello mostrar a los capos que lo desafían el verdadero músculo del Ejército y la Armada. Incluso hay investigadores que afirman que hoy por hoy el despliegue de elementos militares podría ser un indicativo de que México entra en un estado de excepción con claras violaciones al estado de derecho. Un dato, tan sólo en 2008 más de 50 mil elementos castrenses salió de los cuarteles para desempeñar labores que correspondían a la policía civil. Esta cifra ha ido multiplicándose en recientes años ante el reto de los cárteles de la droga que no ceden en su lucha interna y también en su batalla contra elementos militares mandos policíacos. Como sea esta situación, nos indica que el presidente Felipe Calderón no ha respetado del todo el estado de derecho, ya que el ejercito hace labores que no le corresponden y la llamada unificación de las policías, carece de un marco legal.

Para tener en cuenta: No es asunto menor lo que dijo el titular de la Procuraduría General de Justicia en el estado, Rafael González Lastra al remarcar que por desgracia existe apatía por las autoridades federales para detener los problemas en la frontera sur. Claro y conocedor del tema como lo es el procurador tabasqueño aseguró que esta zona se encuentra olvidada y marginada. Además opinó que de no establecerse acciones para el combate de la delincuencia en esa región, los controles de seguridad que establecen en el norte no funcionarán. Así es Canito tienes razón, desafortunadamente la frontera sur sigue olvidada, marginada, discriminada y hay mucha apatía de las autoridades federales en cuanto a la atención que debe dársele a la frontera sur. Les comparto nuestro correo electrónico: jordymx@hotmail.com y en twitter nos puedes encontrar como: @Jorge__Leyva