05 DE JULIO 2016
La Agenda Setting
Por Jorge A. Leyva
Desde la puerta de la casa

En el fondo este acto de limpieza tan simple es el marco con el cuál puede verse que tan alejados estamos ya de las buenas costumbres. Distantes de nuestra solidaridad ciudadana. Barrer la parte frontal de su casa por principio no era un acto solitario e individual, sino el acuerdo consensuado de contribuir a la tarea comunal. Una tradición de actuar en comuna que se remonta a los tiempos prehispánicos. Trabajar entre todos hace la diferencia y da un sentido de pertenencia al grupo que desarrolla una actividad específica organizada y en conjunto.
El trabajar en común acuerdo hizo posible los actos humanos más relevantes, pero también ha servido para destruir lo hecho por la misma comunidad. La idea de progreso no fuera posible si no hay acción en conjunto. Nuestra dependencia para actuar en conjunto raya en la supervivencia de las mismas sociedades.
Las consecuencias que traería una iniciativa acordada tácitamente por los ciudadanos de nuestro tiempo, como el barrer la parte frontal de su casa, sería de una repercusión profunda. Porque para recuperar las buenas costumbres basta la voluntad del ciudadano común que rompería el esquema de apatía e indolencia en el que se ha caído. Digamos que se pondrían en actividad mecanismos enmohecidos por falta de uso, tanto en la familia, los vecinos. Por eso vale la pena preguntarnos: ¿Qué hacemos nosotros por devolverle algo a nuestra colonia? ¿Qué hacemos para solidarizarnos con la comunidad? ¿Qué papel jugamos para tener un mejor entorno?
Si todos colaboramos y empezamos con pequeños detalles como barrer la basura de nuestras casas, esta labor tendría efecto en un menor taponamiento del sistema de drenaje, en el control de plagas y combate a fauna nociva, vectores que golpean nuestra salud comunitaria. Villahermosa empezaría a tener otra cara, la de ciudadanos que estarían comenzando a redescubrir el poder que tienen de incidir en su bienestar. La autoridad siempre tendrá recursos limitados, pero los ciudadanos pueden organizar y hacer su parte con la gente. Sin duda que con las nuevas leyes, los gobiernos tienen la obligación de abrir espacios para que los diversos sectores sociales participen en el diseño, ejecución, evaluación y vigilancia de las políticas públicas, pero también en las pequeñas acciones. No podemos olvidar que la participación ciudadana en el quehacer gubernamental es mandato legal desde hace casi tres décadas. Ampliar la presencia de la sociedad en la determinación de las políticas públicas es un compromiso permanente para impulsar acciones para involucrar efectivamente y de forma sistemática a la ciudadanía en el diseño, implementación y evaluación de los programas y las políticas públicas que emprenda el gobierno. Pero ¿Y porque no empezamos también desde la puerta de nuestras casas? Les comparto nuestro correo electrónico: jordymx@hotmail.com y en twitter nos puedes encontrar como: @JorgeLeyva_