domingo, 2 de diciembre de 2018

Una velada de romanticismo sin fronteras: Luís Represas y Miguel Inzunza

Luís Represas y Miguel Inzunza reafirmaron la conexión entre Portugal y México en esta Feria, una noche de mucha trova y tintes de pop.

En un momento donde estilos musicales como la trova o el folk están delimitados a pequeños circuitos, la participación de Luís Represas en la Feria Internacional del Libro, como parte del programa musical preparado por Portugal para su participación como Invitado de Honor, vino a recordar que estos géneros tienen todavía la capacidad de alcanzar espacios como el Foro FIL. 

El músico portugués ofreció una velada que se caracterizó principalmente por esa ruptura de fronteras, algo que él mismo llama “un viaje que facilita el acercamiento mediante la música de carácter universal”. Además, Represas, un cantante que dejó atrás lo que algunos intérpretes en esta Feria han llamado “portuñol”, también se comunicó con los asistentes en español, una circunstancia que provocó calidez para llegar a un mayor entendimiento en cada uno de los temas que interpretó.

Acompañado por un cuarteto de músicos cubanos, quienes dejaron en claro su experiencia, pero de igual manera mostraron el toque latino en la selección de canciones, Luís Represas consiguió enganchar a los románticos que, con atención, escucharon una serie de historias que tienen referencia a las vivencias cotidianas vistas desde el lado más reflexivo. Así, el portugués, nos condujo hacia un estado de introspección que hace énfasis en los recuerdos, en un pasado que juega con los rincones de la memoria, pero que también se suma a una visión muy personal del aquí y el ahora, algo que pudo apreciarse en el discurso del cantante, quien no perdió oportunidad para demostrar que las posibilidades de la trova continúan venciendo el curso del tiempo. 

Luís Represas, con guitarra electroacústica en mano, ofreció un canto que se conjuga con la suavidad de su tono de voz y la contundencia de las letras de sus canciones, una miscelánea de posibilidades que nos recordó el mar Mediterráneo, pero también el Caribe. Así, Represas nos enseñó esa atracción que hay entre Europa y América, algo que está impreso en muchos de sus cortes que son un manifiesto de la importancia del amor en tiempos aciagos. “Mariana”, “Foi deus”, y “Fora de tiempo”, sintetizaron los propósitos de la música de Luís Represas, un artista que no le tiene miedo a la sobriedad para plantarse en el escenario.

La noche de música romántica continuó con la participación de Miguel Inzunza, un intérprete mexicano que paulatinamente ha ganado presencia gracias a la combinación del pop en sus melodías. Inzunza reafirmó la conexión entre Portugal y México que ha tenido esta Feria Internacional del Libro de Guadalajara, celebración literaria que se encuentra ya en su recta final. Así, con un lenguaje en común, la música, el mexicano interpretó canciones pertenecientes a su nuevo repertorio, además de que no perdió la oportunidad para formar un dueto con Luís Represas. El portugués y el mexicano cantaron su versión de “Yolanda”, popular canción del cubano Pablo Milanés, algo que le dio sentido a ese discurso de ruptura de fronteras que manifestó el propio Represas en su intervención.


De esta manera, las noches en el Foro FIL entran en una etapa de conteo regresivo para llegar a un fin de semana que tendrá como característica la diversidad, y que cerrará este encuentro musical de la Feria. Los portugueses de Moonspell ya están listos para ofrecer este sábado una velada del metal más aguerrido y lleno de tintes sombríos, mientras que el domingo estará dedicado a la tradición de Portugal y al folclor de México con Katia Guerreiro y el mariachi Los Tapatíos. 

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